En 1535 cuando Francisco Pizarro
llego aquí decidió que esta sería la capital de la metrópoli. Un lugar
portuario y con fácil acceso a los Andes.
Así junto al rio Rimac se diseño el
urbanismo en cuadricula de la ciudad, como mandaban las Ordenanzas para la fundación
de ciudades en el nuevos mundo. Esta decía que debían se trazadas a cordel y
regla desde la plaza de Armas, para facilitar asi, la expansión de la ciudad. Y
así lo hicieron Pizarro y los suyos.
Cada manzana contaba
con cuatro lotes. Pizarro, aprovechando su condición de fundador y gobernador
se adjudicó la manzana entera ubicada en el lado norte de la plaza, entre ésta
y el rio Rimac. El lote norte del lado oriental de la plaza fue destinada a la
vivienda del cura, el lote sur de ese mismo lado a la construcción de la
iglesia y el lote norte del lado occidental fue destinado a servir de
ayuntamiento, repartiéndose las demás manzanas entre los conquistadores.
Así esta plaza
siempre ha sido el corazón Político y religioso de la ciudad.
En el centro de la
plaza se construyo una pileta en 1578. Esta pileta fue reemplazada por otra
mandada hacer por el virrey García Sarmiento de
Sotomayor, Conde de Salvatierra, e inaugurada el 8 de septiembre de 1651, la que con algunas refacciones, se mantiene hasta la
actualidad.
Durante la época virreinal, la plaza mayor sirvió como mercado, como plaza de toros y como sitio de ejecución
de los condenados. Asimismo se desarrollaron en ella los autos de fe que celebró el Santo Oficio de la Inquisición de la que uno de los tres
tribunales que tenía en América se encontraba en Lima. El
primer auto de fe se celebró el 15 de noviembre de 1573 y en este se dictó la
primera condena a ser quemado en toda América.
El condenado Mateo Salado fue ejecutado ese mismo
día en el «quemadero» que se ubicaba aproximadamente donde hoy se encuentra la Plaza de toros de
Acho.
Otro de los edificios de la plaza es la catedral bella
replica de la original destruida por un terremoto en 1746. El edificio es una réplica
de la catedral de Jaén. Contiene algunos retablos de estilo Churrigueresco y la
tumba de Francisco Pizarro, que se encuentra en la primera capilla de la
derecha, sus restos mortales fueron descubiertos en 1977 con motivo de unas excavaciones
en la cripta.
Al lado del la Catedral se levanta el palacio del
Arzobispo, un bello exponente del renacimiento colonial, de hermosas
balconadas, como las que hay en varias calles de la ciudad. Este edificio también
recibió el azote de los diferentes terremotos y en los años 20 tuvo que ser
reconstruido.
En frente del Arzobispado tenemos la Municipalidad de
Lima, que data de 1940, lo mas interesante de este edificio es su fachada y su
preciosa biblioteca. Junto a este edificio se
encuentra el club de la Unión, club social con aires aristocráticos.
El otro gran edificio de la plaza es el Palacio del
Gobierno, construido donde el conquistador tenía su vivienda en los primeros años
de la conquista y donde fue asesinado en 1541. Se termino en 1940 el edificio y
su estilo versallesco no encaja mucho con el resto de la plaza.
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